sábado, 19 de noviembre de 2022

Tomar el sol: beneficio para la salud y su riesgo

Tomar el sol a diario es beneficioso para la salud: ¿pero cuánto? ¿Sus efectos son todos derivados del aumento de la vitamina D en nuestro organismo? ¿Hay riesgos relacionados con la exposición solar repetida?

Un publicación de tipo original, basado en una extensa revisión bibliográfica (109 referencias), y realizada por un amplio equipo multidisciplinar internacional (https://www.mdpi.com/1660-4601/17/14/5014/htm), trata de estudiar los beneficios y riesgos asociados a la toma de sol. Su principal conclusión es que la exposición insuficiente al astro solar es un problema importante de salud pública en la actualidad. Este hecho puede llegar a ocasionar casi medio millón de muertes en Europa al año, y una mayor incidencia de cáncer de mama, cáncer colorrectal, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, síndrome metabólico, esclerosis múltiple, enfermedad de Alzheimer, autismo, asma, diabetes tipo 1 y miopía. Los autores del artículo repasan la evidencia de los estudios seleccionados en dichas patologías.

La vitamina D ha sido considerada durante mucho tiempo el principal mediador de los efectos beneficiosos de la exposición al sol. Sin embargo, no se ha demostrado con una suficiente evidencia que la suplementación oral con vitamina D prevenga las patologías anteriormente reseñadas. Así, la vitamina D podría no ser la única directamente implicada en los beneficios del sol, y comportarse más bien como un biomarcador de referencia de los niveles de insolación. Señalan que posiblemente otros mediadores como el óxido nítrico (vasodilatador endógeno), y otros no bien conocidos, pudieran estar directamente relacionados con los beneficios para la salud de la toma habitual del sol. También actúan en este sentido los efectos directos de la radiación ultravioleta en las células de la sangre periférica, cercana a la piel.

En cuanto a los efectos perjudiciales de la insolación desmedida, se debe tener mucho cuidado en evitar las quemaduras solares; asimismo, hay que tener en cuenta la exposición solar repetida, aun a baja dosis, por sus efectos acumulativos. Durante las temporadas de alta radiación ultravioleta ambiental (sobre todo fin de primavera, verano, e inicio del otoño, en España) debe limitarse la exposición solar a no más de 5-30 minutos al día (y dependiendo del tipo de piel, así como el índice ultravioleta de ese día). Todo ello evitará, según los autores del artículo, una mayor incidencia de cáncer de piel (melanoma y otros: espino/basocelular), el fotoenvejecimiento cutáneo, y lesiones en los ojos. Según algunos estudios revisados, el uso de fotoprotectores mostró no sólo que el uso adecuado de protector solar previene las quemaduras cutáneas, sino que puede hacerlo sin interferir indebidamente con la síntesis de vitamina D.

domingo, 13 de noviembre de 2022

Déficit de vitamina D y salud mental

En las últimas décadas, se ha investigado bastante acerca de la vitamina D, y sus propiedades no sólo relacionadas con la homeostasis del metabolismo del calcio-fósforo en el hueso, sino también sobre su impacto en la optimización de la salud en otros órganos y aparatos. Ello incluye la relación de esta auténtica "prohormona" con la cognición y las emociones, el estado de estrés, la ansiedad, la depresión, la mala calidad del sueño, el estado de ánimo y las implicaciones neuropsicofisiológicas en general.

Un estudio tipo revisión sistemática publicado en la revista Clinics por autores brasileños (https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC8552952/), en la que incluyeron sujetos de entre 18 y 59 años sin enfermedades asociadas, trató de establecer la asociación entre variables psicofisiológicas y los niveles de vitamina D circulantes. Se seleccionaron un total de 684 artículos, de los cuales 15 se consideraron potencialmente relevantes, siendo elegidos para los resultados finales, con más de 950 personas, especialmente mujeres. En los resultados del presente trabajo, algunas evidencias sugieren que los principales aspectos psicofisiológicos relacionados con bajos niveles de vitamina D son síntomas de depresión o depresión establecida, seguidos de rasgos neuróticos (trastornos obsesivo-compulsivos y de pánico) y/o ansiedad; estos hallazgos se observaron en 13 de los 15 estudios analizados en esta revisión. En cuanto a la posible fisiopatología, algunos de estos estudios aducen una posible relación entre la vitamina D y los síntomas depresivos, porque dicha vitamina pudiera ejercer efectos neuroprotectores, al inhibir las citoquinas inflamatorias, como la interleucina 6. Estas citoquinas aumentarían el daño oxidativo al tejido cerebral y la neuroinflamación demostrada en muchos sujetos estudiados, lo cual podría relacionarse con los estados ansiosodepresivos.

En sus conclusiones, los autores apuntan que se ha observado una asociación entre el aumento de los niveles séricos de vitamina D y la reducción de los síntomas de depresión, ansiedad y mejora del estado de ánimo en general. En cualquier caso, se necesitan más estudios para mejorar nuestra comprensión de su papel en la modulación de los aspectos psicofisiológicos de los niveles de vitamina D.

Tópico a desmontar: el colesterol dietético aumenta el colesterol en sangre

Hace años, se afirmaba la relación entre el consumo de alimentos altos en colesterol y el medido en sangre, alertando sobre sus efectos card...