martes, 25 de febrero de 2020

El consumo regular de aguacates disminuye los niveles de LDL-colesterol

Hace 2 años publiqué un post en el blog, comentando en general las propiedades beneficiosas del aguacate (ENLACE). Un reciente estudio publicado en The Journal of Nutrition (Volume 150, Issue 2, February 2020, Pages 276–284), sugiere que comer un aguacate al día puede ayudar a mantener a raya el colesterol LDL (la fracción del colesterol malo), y procurar beneficios saludables para el corazón.
En este trabajo de investigación sobre alimentación, aleatorizado y controlado, los investigadores encontraron que comer un aguacate al día estaba asociado a niveles más bajos de LDL (específicamente las partículas pequeñas y densas de LDL) y LDL oxidada en adultos con sobrepeso u obesidad. Todo el LDL es malo, pero el LDL pequeño y denso es particularmente malo. Estas partículas oxidadas son particularmente dañinas ya que promueven la acumulación de placa en las arterias. Las LDL oxidadas promueven una reacción en cadena que induce la aterosclerosis, que es la acumulación de placa en la pared de la arteria. La oxidación no es buena, así que si puede ayudar a proteger el cuerpo a través de los alimentos que comes, eso podría ser muy beneficioso. Además, otras muchas investigaciones apuntan a que la oxidación es la base de enfermedades como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. Después de cinco semanas con la dieta del aguacate, los participantes del estudio (45 sujetos, entre 21-70 años) tenían niveles significativamente más bajos de colesterol LDL oxidado que antes del comienzo del estudio o después de completar las dietas bajas en grasas y moderadas. Los participantes también tenían niveles más altos de luteína, un antioxidante, al finalizar el estudio entre los que seguían una dieta con aguacate. Probablemente, dicha luteína podría ser el compuesto bioactivo que protege el LDL de la oxidación.

martes, 18 de febrero de 2020

La obesidad en varones se asocia a niveles bajos de testosterona

Investigadores españoles adscritos a la Unidad de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Virgen de la Victoria (Málaga), y al Instituto de Salud Carlos III, han relacionado obesidad con disminución de los niveles de testosterona en hombres. Se trata de un estudio transversal, y por tanto no sirve para detectar causalidad: ¿la obesidad en varones causa hipoandrogenismo (déficit de testosterona) o viceversa?
En los últimos años, se ha constatado que la hipoandrogenemia asociada a la obesidad está aumentando de forma paralela al número de varones obesos en el mundo, pero se desconocía su prevalencia en hombres jóvenes no diabéticos con sobrepeso y obesidad. Por este motivo, los expertos españoles, cuyo trabajo ha sido publicado en la revista internacional Obesity (https://doi.org/10.1002/oby.22579) han querido analizar la prevalencia de la hipoandrogenemia y factores de riesgo asociados en esta población. Para ello, han evaluado a 266 hombres no diabéticos menores de 50 años de edad con obesidad, remitidos desde atención primaria, encontrando niveles reducidos de testosterona en el 25,6% de los participantes, aumentando este porcentaje hasta el 80% en los varones con obesidad más extrema. Se puede deducir que el exceso de peso es el factor que más estrechamente se relaciona con el descenso de los niveles de testosterona. Otros factor relacionado con el descenso en los niveles de testosterona es el incremento de la edad, produciéndose una reducción en las concentraciones plasmáticas de LH (hormona hipofisaria que estimula la producción de testosterona a nivel testicular). El médico puede también sospechar que el hipoandrogenismo es secundario a otras causas menos frecuentes: trastornos hipofisarios primarios, hemocromatosis (enfermedad genética que produce acúmulo excesivo de hierro en los tejidos corporales), enfermedades autoinmunes, enfermedades infecciosas, ciertos medicamentos (sobre todo hormonales)...

¿Y qué consecuencias trae el descenso de los niveles de testosterona? Pues no sólo la temida disfunción eréctil, que lleva a la impotencia, sino también esterilidad, y otras:
  • Peor composición corporal (mayor cantidad de grasa visceral y menor de músculo).
  • Ginecomastia (aumento glándulas mamarias) y pérdida del vello corporal.
  • Síndrome metabólico, con incremento de la resistencia a la insulina y diabetes tipo 2, hipertensión arterial y dislipemias. En definitiva, aumento de predisposición a enfermedades cardiovasculares.
  • Osteoporosis. Es una de las causas más frecuentes de pérdida de masa ósea en el varón adulto.
  • Un síndrome parecido a la menopausia femenina, con diversos síntomas: fatiga, dificultad para concentrarse, alteraciones del ánimo, sofocos, etc.
Los investigadores han destacado la importancia de implementar en estos pacientes estrategias para abordar el exceso de peso y promover un estilo de vida saludable, para evitar la obesidad y posibles complicaciones asociadas, como el propio descenso de testosterona. Como siempre, una vida sana evitando factores de riesgo como la falta de ejercicio, mala alimentación, estrés, hábitos tóxicos, etc, puede probablemente ayudar a mejorar este problema de salud global.

domingo, 9 de febrero de 2020

Los niños que utilizan más pantallas tienden al sobrepeso

Un estudio de investigación (https://www.nature.com/articles/s41598-019-46971-6) realizado por un grupo de de la Universidad de Helsinki (Finlandia) y publicado en la revista 'Scientific Reports' , investigó los vínculos entre el tiempo frente a una pantalla y el sobrepeso utilizando los datos de la base de datos 'Salud en Adolescentes de Finlandia', que incluye a más de 10000 niños de toda Finlandia con una edad entre 9 y 12 años.
Los participantes informaron sobre el tiempo que pasaban viendo programas de televisión y películas en las pantallas y la cantidad de uso sedentario de ordenadores fuera del horario escolar. Se midió la estatura, el peso y la circunferencia de la cintura de los niños.
Los resultados demostraron que el tiempo pasado frente a las pantallas está asociado tanto con el sobrepeso general como con la obesidad abdominal. No hubo variación en los hallazgos por edad, sexo, idioma nativo, duración del sueño y, curiosamente, con el ejercicio durante el tiempo libre. Ver mucha televisión también se asoció con el sobrepeso y la obesidad abdominal en los niños que más ejercicio hacían!
Debe señalarse que pos su diseño, de tipo transversal, no pueden realizarse inferencias sobre la causalidad. Puede ser que los niños con sobrepeso pasen más tiempo frente a las pantallas, o que más tiempo frente a las pantallas pueda resultar en sobrepeso.
El estudio tampoco midió la intensidad del ejercicio. A los participantes solo se les preguntó sobre la cantidad de tiempo que pasaban haciendo ejercicio en su tiempo libre. En definitiva, se necesita más investigación sobre el efecto combinado del tiempo frente a las pantallas, la actividad física y la dieta en el peso de los niños.

lunes, 3 de febrero de 2020

La grelina, la hormona del hambre, también mejora la memoria

La grelina es una hormona secretada por el estómago, la cual induce la sensación de apetito. Por ejemplo, los niveles de grelina serían altos si estuvieras en un restaurante esperando una deliciosa comida que se servirá en breve. El aumento de su nivel en sangre durante el ayuno induce el hambre, estimulando la secreción de ácido gástrico y la motilidad gastrointestinal. Y lo notamos con los típicos movimientos "de tripas" cuando se acerca el momento de comer... Es por ello que su papel en la regulación del apetito y el peso convierte a esta hormona en una interesante diana terapéutica para el tratamiento de la obesidad y las enfermedades relacionadas.

Además, la grelina modula otros procesos fisiológicos como:

  • La secreción de otras hormonas por la hipófisis (hormona del crecimiento, prolactina y hormona ACTH).
  • Regula la homeostasis de la glucosa al disminuir la secreción de insulina en las células β del páncreas y estimular la producción de glucosa (neoglucogénesis) en el hígado.
  • Disminuye la presión arterial y aumenta la función cardíaca.
  • Regula positivamente el metabolismo del hueso estimulando a los osteoblastos y aumentando la densidad mineral ósea.

Un equipo de investigadores de la Universidad del Sur de California (Estados Unidos) ha identificado un nuevo y sorprendente papel para la grelina, la llamada “hormona del hambre”. Hasta ahora se pensaba que se encargaba solamente de enviar señales de hambre desde el intestino al cerebro, pero los nuevos hallazgos, presentados en la reunión anual de la Sociedad para el Estudio del Comportamiento Ingestivo, sugieren que también puede ser importante para el control de la memoria, mejorando dicha función cognitiva.
Recientemente se ha descubierto que, además de influir en la cantidad de alimentos consumidos durante una comida, el nervio vago también influye en la función de la memoria.

El grupo de investigadores de esta universidad planteó la hipótesis de que la grelina es una molécula clave que ayuda al nervio vago a promover la memoria. Usando interferencia de ARN para reducir la cantidad de receptor de grelina, los investigadores bloquearon la señalización de esta hormona en el nervio vago de ratas. Cuando se les asignó una serie de tareas de memoria, los animales con señalización de grelina vagal reducida se vieron afectados en una prueba de memoria episódica, un tipo de memoria que implica recordar qué, cuándo y dónde ocurrió algo, como recordar el primer día de clases. Para las ratas, esto requería recordar un objeto específico en una ubicación específica.
Estos nuevos descubrimientos se suman a nuestra comprensión de cómo se generan los recuerdos episódicos, así como la relación entre la memoria y el comportamiento alimentario. En el futuro, los investigadores podrán desarrollar estrategias para mejorar la capacidad de memoria en los seres humanos mediante la manipulación de la señalización de la grelina desde el sistema gastrointestinal hasta el sistema nervioso central.

Tópico a desmontar: el colesterol dietético aumenta el colesterol en sangre

Hace años, se afirmaba la relación entre el consumo de alimentos altos en colesterol y el medido en sangre, alertando sobre sus efectos card...